martes, 12 de abril de 2011

¡AVIÉNTATE, PONLE 2ª!

Hace un tiempo que en mi vida han pasado cosas impresionantes, cosas que nunca creí poder llegar a experimentar y que gracias a Dios he podido vivir.
Dentro de esas cosas maravillosas existen algunas que son crecimiento espiritual, un crecimiento tan importante y valioso para nuestras vidas que cuando lo haces y lo buscas vives cosas incomparables.
Siempre en nosotros existe el anhelo de hacer cosas para Dios, de crecer en la fe y poder hacer más cosas para Dios pero que tan dispuestos estamos a hacer la voluntad completa del padre?

Experimentar un nuevo nivel de fe (por nombrarlo de algún modo) es experimentar algo increíble en tu relación con Dios, el quiere que cada día crezcamos mas en el, que cada día confiemos mas y que nunca dudemos de lo que Dios pone en nuestras vidas.

Es como cuando vas en tu auto imagina que vas en primera velocidad y llega un momento de aceleración en el cual tu motor exige un cambio ¿cierto?, en ese momento es lógico que subas a segunda velocidad, de lo contrario tu auto se quedaría siempre igual y quizá puedas dañarlo ¿o no?

Pongámoslo ahora en un sentido de tu vida con Dios cuando conocemos a Dios por primera vez existe un proceso de conocimiento de enamoramiento con Dios en el cual vas descubriendo su palabra, es ahí cuando estás en primera. Cuando has descubierto la voluntad de Dios para tu vida es momento de cambiar, de subir un escalón mas, de poner segunda.

Muchos de nosotros hemos caído en muchas ocasiones a la conformidad, que por el hecho de contar ya con un servicio en nuestras congregaciones terminamos trabajando de una forma interna, despreocupándonos por lo que pasa afuera de esas puertas y de lo que lamentablemente para muchos hermanos se vuelve en cotidianeidad.

Jesús nos llama a hacer grandes cosas!, pero a veces pensamos que por el hecho de ya hacer algo en nuestras congregaciones o simplemente tener un lugar seguro en una congregación es suficiente.
Debe existir un momento en el que Dios te confronte y te pregunte si estás dispuesto de verdad a hacer su voluntad, ¿te imaginas ese momento?
Cuando Jesús les dice a sus discípulos acerca de lo que conlleva seguirle y los invita a hacerlo es un momento de confrontación, de decisión en el cual ellos tomaron la decisión de seguirle sin duda alguna.

 Mateo 16:24-25 (NUEVA VERSIÓN INTERNACIONAL)

24 Luego dijo Jesús a sus discípulos:
   —Si alguien quiere ser mi discípulo, tiene que negarse a sí mismo, tomar su cruz y seguirme.25 Porque el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda su vida por mi causa, la encontrará.

Te das cuenta lo impactante que son estas palabras, muchas veces lo leí y quizá no había entendido la magnitud de sus palabras, pero cuando sientes el anhelo de seguirle de hacer cosas para su obra es cuando quizá lo entiendas, posiblemente tu sientas en tu corazón ese anhelo, ahora lo que sigue es tomar la decisión determinante en tu vida.
¿Qué pasaría si Dios te pidiera dejar todo en pos de el?, ¿Qué harías?
Es una pregunta que quizá en un momento todos diríamos ¡Sí!, exclamando a Dios pero, en la realidad cuando quizá analices las cosas empieces a encontrar tropiezos y cosas que no son de Dios que pondrán dudas en tu corazón.
Pero sabes algo si confías en Dios, créeme todo, absolutamente todo estará bien.
El Salmo 121 expresa mucho de lo que significa dejar todo en Dios y pasar a ese siguiente nivel, ponerle 2ª a tu vida.

Salmos 121 (NUEVA VERSIÓN INTERNACIONAL)

 1 A las montañas levanto mis ojos;
      ¿de dónde ha de venir mi ayuda?
2 Mi ayuda proviene del Señor,
      creador del cielo y de la tierra.
   3 No permitirá que tu pie resbale;
      jamás duerme el que te cuida.
4 Jamás duerme ni se adormece
      el que cuida de Israel.
   5 El Señor es quien te cuida,
      el Señor es tu sombra protectora.
6 De día el sol no te hará daño,
      ni la luna de noche.
   7 El Señor te protegerá;
      de todo mal protegerá tu vida.
8 El Señor te cuidará en el hogar y en el camino,
      desde ahora y para siempre.

Si Dios es quien te está llamando a levantarte, a hacer cosas para él, ¿quién crees que pueda detenerte si él es quien te cuida?, él es quien ve por ti en cada momento.
Depositemos nuestra confianza en Dios confiando en su palabra.
Si tienes ese llamado, si así lo has sentido en tu corazón ponlo en oración. Dios quiere hacer grandes cosas de tu vida pero para ello debemos estar confiados en él y dejar que sea Dios quien tome el control de todo en nuestras vidas.

¡Ponle 2ª y que Dios te bendiga enormemente!
Victor G.